Ñublense rescató un empate a cero en su visita al Aucas este miércoles por la Copa Libertadores. Ambos equipos terminaron con diez jugadores y el portero Nicola Pérez detuvo un lanzamiento penal que pudo cambiar la historia en favor del elenco ecuatoriano. Con la igualdad, los chillanejos quedan en el tercer lugar del Grupo A con cinco puntos, uno más que el Aucas y los mismos que Flamengo, aunque el «Mengao» juega este jueves con Racing.
En la última fecha, Ñublense enfrentará a la «Academia». El club argentino ya está clasificado a octavos.
Hay tres escenarios posibles para el cuadro dirigido por Jaime García: Avanzar de fase como segundo del grupo, caer a la Sudamericana o quedar en el último lugar de la zona. El primer tiempo en Quito tuvo de todo. A los 10′ Aucas se quedó con diez. Edison Caicedo cortó a Patricio Rubio cerca del área cuando este se iba solo hacia el arco y fue expulsado.
Con uno más, Ñublense creció, manejó la posesión y Bayron Oyarzo hizo trabajar a Hernán Galíndez, ex Universidad de Chile, con un potente remate. Sin embargo, el local nunca se rindió. Inquietaba con las pelotas detenidas y con las contras.
A los 34′ el árbitro Ángel Arteaga cobró penal por mano de Nicolás Zalazar. El defensor recibió amarilla, ya lo habían amonestado en la jugada anterior y se fue a las duchas.
Ambas escuadras quedaron con diez futbolistas. Jhon Cifuente se paró frente a la pelota para ejecutar la pena máxima. Pero Nicola Pérez estuvo brillante y tapó el remate. Fue un momento clave. Ñublense estaba desorientado.
En el segundo tiempo, la visita retrocedió y pasó a defenderse muy cerca de su área. Le costaba sostener la pelota, no podía enlazar las líneas y sufría mucho para atravesar la mitad de cancha. El Aucas apretó con todo. Rómulo Otero, ex Huachipato, inquietó con tres tiros libres y un cabezazo que se fue apenas desviado.
Cerca del final, Michael Carcelén sacó un durísimo remate y Pérez salvó al elenco chileno. Fue la figura de la noche.